miércoles, 24 de junio de 2009

...A Moment Of Clarity...

Junio 24, 2009

Esperando el tren, me encontré con un libro, lo cual es algo loco ya que dicho libro es de 1970 y, aun así, 39 años depués, yo lo tomé de una batea. Primero lo hojee (ojee), y acto seguido lo intercambie por un papel numerado. El señor se mostró contento con el cambio y yo por mi parte también lo estaba, aunque no se que tanto lo mostré... hacía mucho frío como para pensar en eso.

En fin, transcribo aca uno de los versos contenidos en este manojo de hojas, porque me hizo acordar a algo que ayer ocupó mi cabeza rato largo.


Eternidad

¿Por qué todas las horas de la vida,
no tienen dimensión determinada?
Unas son largas, lentitud de espera,
otras tan cortas, que al nacer se apagan.

El reloj va marcando inexorable,
el trayecto que tiene señalado,
y no sabe, tal vez ni lo presiente,
sus cálculos estan equivocados.

Una vida no alcanza, a veces sobra.
Una hora podrá ser breve plazo,
un minuto podrá ser mucho tiempo,
y un segundo, tal vez un rato largo.

Después eternidad, siglos y siglos,
galope de corceles desbocados.
No existen ya fronteras en el tiempo,
ni tampoco presente ni pasado.


"mis versos y yo",
de Milila de Tarsia, Argentina, noviembre de 1970


Junio 23, 2009


Momentos. O uno solo. Sólo es eso: un instante, un segundo, un día, un año... sólo un momento. Y a través de ellos viajamos. De momento en momento pasa nuestra vida.
Mirar hacia atrás. Sólo veo momentos, ordenados en recuerdos. Ahí están todos. Yo, delante de ellos. A mis espaldas, asegurándome que estoy, que soy, hoy, ahora, en este lápiz, en esta hoja, sólo un momento.
Y durará por siempre, hasta que un nuevo momento comienze. ¿Cuándo? No lo sé. En algún momento, seguro...
A mis espaldas, se encuentran, acurrucados, encimados, casi invisibles y a la vez tan tangibles como esta mi alma. Se moldean, se deforman, me definen y me describen. Marcan el hoy porque son el ayer. Aun cuando ya han sido, siguen siendo, estan aquí, en mi, ahora.
Y cuanto más pienso en esto, más me atrapa. No puedo escaparles. A donde quiera que mire sólo eso veo: momentos. Algunos eternos, otros no. Nada escapa. Un color, un sonido, una sensación... son todos momentos! Instancias de una existencia que nos contiene, nos aguanta, nos pare, nos vomita y, en un momento, nos elimina, para siempre, o por tan sólo un momento. ¿Correr? No sirve. ¿A dónde? ¿Por cuánto tiempo? Es inútil, creo que enloquecere... en cualquier momento!
Sólo me queda aceptar, dejarme llevar, intentar contribuir a este mi momento. Porque es mío, y por lo tanto único. Puedo hacer con él lo que quiera. Puedo dejar el tiempo pasar, porque se que eso no lo afectaría.
Hacer algo, intentar aprovecharlo. Está aquí. Por mi existe. Así como yo existo para él. Ahora. Fin. Comienzo. Soy. En este presente, que pronto será mi pasado. Uno más, entre tantos, sumándose, dejándome sin más, entre el que fue, el que es y el que vendrá.
Y así convivimos, brevemente, día tras día, año tras año, dejando todo en este momento, deseando nuevos, recordando viejos, disfrutando el actual.
Cualquiera que sea mi motivo, poco importa; es cuestión de un momento y vuelta a empezar. Trataré de seguir aquí, soportando este encierro. Espero sea losuficiente, y que , si fuera posible, se cruzen dos momentos, el tuyo con el mio, y que dure lo suficiente para aguantar un poco más, deseando que vuelva a suceder, en cualquier momento.

1 comentario:

  1. Es increíble cuando suceden esas cosas..
    En el lugar y el momento indicado, confío en que las cosas pasan por una razón

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